lunes, 8 de noviembre de 2010

Bajo ningún pretexto...

Recuerdo una frase de la película "el lado oscuro del corazón" (poema de Oliverio Girondo) que dice: ”Me importa un pito que las mujeres tengan los senos como magnolias o como pasas de higo; un cutis de durazno o de papel de lija. Le doy una importancia igual a cero al hecho de que amanezcan con un aliento afrodisíaco o insecticida. Soy perfectamente capaz de soportarles una nariz que sacaría el primer premio en una exposición de zanahorias. Pero eso sí, y en esto soy irreductible, no les perdono bajo ningún pretexto que no sepan volar, si no saben volar pierden el tiempo conmigo”.

Me sentí identificado, no puedo perdonarle a ninguna que no sepa volar. El problema es cuando la que vuela no sabes a donde te puede llevar. Me pregunto las consecuencias. Le dije: "me gustas; no sé que estoy haciendo". Básico, elemental, sencillo, ridículo tal vez.

Inmoral para el corazón, digno para el alma y una pastilla de destrucción para la mente.



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