lunes, 14 de marzo de 2011

Paloma

Paloma tiene alas. Estoy seguro que sabe volar. Asiente con la cabeza. Le di serias instrucciones sobre la ubicación de cada volumen, colección, libro, álbum, todo, para que no pierda tiempo en la operación y logre con total éxito la misión encomendada.

Tiene alas; sabe algo. Juega con los colores porque aprendió a utilizar los pinceles hace algunos años y guarda en su juventud las ansias que se van perdiendo con los años. No la envidio, compartimos algo que no conocemos y por eso de vez en cuando volvemos a encontrarnos, como en secreto, para no despertar rumores y en silencio, porque el ambiente nos inunda con sus sonidos y la música que cada uno escucha.

Nos comunicamos sin estar. No miro el reloj y desconozco si ella lo hace. No importa cuando tenemos un plan que llevar a cabo: iremos configurando lugares imaginarios para encontrarnos, dividir el botín, hablar de Oliveira y la Maga, de las calles de París que no conocemos pero que hemos caminado más de una vez.

Paloma tiene alas; la realidad. Se discuten las leyes de la física pero no interesa lo concreto cuando lo real es algo imaginario en un mundo que existe pero que solo dos pueden ver.


No hay comentarios:

Publicar un comentario